UCN Mexxicamelot

Escribo esta entrada más para mí que para los demás... a veces externar lo que uno piense y siente ayuda a dejar atrás cuestionamientos para encontrar claridad.

Vivir en una tercera dimensión resulta muy difícil a veces, especialmente para los que tenemos mucha sensibilidad y que conocemos la verdadera ley del tiempo, tiempo es arte. Transitar entre dos frecuencias, la del tiempo artificial y la del tiempo natural, a veces resulta muy cansado, porque no estás ni en una, ni estás en la otra al cien por ciento.

Sé que el objetivo principal de la gran aventura en la Tierra es crecer en consciencia, pero en realidad es con la finalidad de ser felices.

Nuestro ego, los miedos y la esclavitud en la que nos encontramos nos han hecho olvidar nuestra esencia divina, que es perfecta y eterna. Nos enfocamos en cómo nos vemos, lo que tenemos, lo que está haciendo el otro, idealizamos situaciones y en realidad todo esto es un gran teatro para distraernos de lo que es verdaderamente importante.

Ayer tuve un sueño en el que me encontraba con el ángel que dejaba las huellas del Samsara detrás de los pasos de Dios... todavía no termino de entender qué significa eso, pero hoy que me levanté y recordé que iniciamos la onda encantada del perro, creo que hay una relación muy fuerte.

El propósito de esta onda encantada es atraer el amor incondicional para trascender el espíritu.

Me da risa recordar ahora que en el sueño yo le decía, tú no eres a quien yo estoy buscando... pero estaba descalzo y necesitaba unos calcetines, por lo que yo le decía que yo tenía unos de hombre y se los podía dar porque los necesitaba.

También soñé con un Buda en el cielo, que estaba en su pose de meditación, detrás de una nube, pero no era en realidad un buda, era un paracaidista que había olvidado abrir su paracaidas, y caía al suelo lastimándose porque había olvidado abrir el paracaidas.

Pero antes de eso, vi a una niñita con un disfraz acolchonado que estaba colgada de un tendedero, y se estaba zafando, por lo que cayó al suelo. Pero ese colchón le permitió caer sin lastimarse, y aunque si se había espantado, se levantó y siguió jugando...

Ahora que lo reflexiono, creo que eso es lo que debemos hacer... si nos aferramos a encontrar el momento "perfecto" para abrir el paracaidas del amor incondicional (porque te aseguro, que el Viento Cósmico siempre estará soplando para que ese paracaidas del Perro Magnético abra en plenitud y puedas volar en confianza, sin importar de cuan alto caigas), nos lastimaremos y a nuestro paso lastimaremos a otros.

Condicionar el amor, especialmente en momentos de duda y oscuridad tan solo bloquea más la conexión al corazón.

Debemos ser como la niñita y permitir que el amor incondicional cree una capa protectora alrededor nuestro... y esa capa debe iniciar por amarnos incondicionalmente a nosotros mismos primero! Con nuestras dudas, errores, apegos, fracasos y todas esas aparentes emociones negativas, ya que estas frecuencias que parecen bajas, en realidad son herramientas de aprendizaje!

¿Por qué? Porque bajamos a esta dimensión tan densa, a la polaridad, para poder evolucionar. Involucionamos, es decir, encarnamos en estos cuerpos terrenales y todo lo que ello conlleva, para poder elevarnos por encima de esos momentos de tristeza y duda... y para ello hay seres del otro lado del velo que nos están apoyando y amando, incondicionalmente.

Pero lo olvidamos... el samsara deja las huellas de los pasos del Padre en su creación física para que nosotros podamos animarnos a recordar, aunque todo sea aparente caos y confusión a nuestro alrededor.

Es bueno sentir emociones negativas, porque ellas nos empujan a que florezca nuestra energía transmutadora, porque como Dios, somos creadores y transformadores de la realidad. y podemos elevarnos más allá de cualquier apariencia de discordancia y podemos cambiar nuestra realidad.

Y como Dios sabe que en esos momentos de duda necesitaríamos guía amorosa, están tantos seres de luz a nuestro alrededor.

Sin importar cuán baja sea tu frecuencia, cuántos errores hayas cometido, cuán de tercera dimensión sea tu realidad, siempre siempre estarán a nuestro lado estos maestros y protectores para responder a nuestro llamado.

Hasta Jesucristo mismo, en su momento de mayor temor y tristeza, cuando los demás aparentemente le habían abandonado, invocó el amor de los ángeles, ese amor incondicional, que lo confortó cuando más lo necesitó. Él experimentó todas estas emociones al encarnar, y a pesar de estar en aparente soledad y en un punto muy bajo, cuando hizo el llamado, fue escuchado.

Así que el día de hoy, para ayudarnos a transitar esta onda encantada del Perro, y que recordemos el amor incondicional de Dios, y recordemos que nosotros mismos tenemos esa semilla del amor incondicional y del perdón, para nosotros mismos y para los demás, les comparto este mensaje para que recibamos la asistencia de los ángeles, que son los mensajeros de Dios, y que, por más bloqueados que estemos, por más tristes, frustrados y desesperados, lograremos esa conexión divina, tal vez no en su potencial entero, pero ellos nos pueden ayudar a elevar nuestra frecuencia para así desbloquear nuestro canal de comunicación, no sólo con ellos, sino también con nuestro Yo Superior, al que mi amado maestro Valum Votan llamaba el Doble Dimensional, nuestro propio Tío Joe, e igualmente con los Maestros de las Estrellas y nuestros ancestros y guías, que están más que entusiasmados de tener esa conexión con nosotros y esperan paciente y amorosamente a que nos elevemos más allá de los problemas cotidianos de la tercera dimensión.

En este día de predicciones sublimes, llego a ti enviado por Dios. Traigo bendiciones a tu vida y mucha energía que podrás compartir.

Ven... entra en mi aura de refulgencia divina y llena tu mundo de amor. Ven... coge mi mano y aspira mi aroma. Apóyate en mi corazón... cierra tus ojos y visualiza la Corte Celestial.

Ángeles y más ángeles... descienden a tu espacio. Llegamos a tu lado para asistirte... para llenarte de dicha, de ternura, de cariño...y también para decirte que siempre que pidas con amor nuestra presencia, tendrás apoyo, protección y ayuda.

Junto a ti estaremos con nuestra luz angelical...con nuestro amparo celestial...Ahora recibe nuestra fuerza sagrada para que tú, a la vez, asistas con ternura y te conviertas en vehículo del deseo de Dios. Sonríe felíz, porque hoy tu día estará lleno de amor...tienes la ayuda angelical...y muchos suspiros de amor.

In Lak' Ech!

Hun Ik, Agente Galáctica 222